Demostrando una vez más que la lucha es el camino (o la vía, tal y como dicen los ferroviarios), tras alcanzarse un acuerdo el viernes pasado, y tras 75 días de Huelga, y 48 de acampada en los jardines frente a RENFE-Campo Grande de Valladolid, los compañeros han comenzado ayer mismoa reintegrarse al trabajo. El acuerdo contempla que los despedidos son readmitidos, que no se realizarán nuevos despidos, y que se cancelan los planes para dejar sin trabajo a tres o cuatro empleados más a finales de julio y otros dos o tres en septiembre, repartiéndose la carga de trabajo.
La lucha ha contado en todo momento con el apoyo del resto de trabajadores vallisoletanos, como demostraron en las manifestaciones realizadas.
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